DESDE QUE EMOCIÓN TRASMITIMOS NUESTRAS ACCIONES
Posted on April 16, 2025 by Fernando Gian Pierre Torres Corcuera , One of Thousands of Life Coaches on Noomii.
Descubre cómo la emoción desde la que actúas puede transformar tu realidad y la de otros. Vibra alto y elige conscientemente tu energía diaria.
Hay una pregunta tan poderosa que, si la dejas entrar en tu vida, puede cambiar por completo tu realidad:
¿Desde dónde estoy haciendo esto?
Y no se trata del lugar físico, sino del lugar emocional desde donde nace cada acción.
Piénsalo. No es lo mismo hacer una llamada por miedo a perder algo, que hacerla desde el deseo genuino de aportar valor. No es lo mismo trabajar con resentimiento o frustración, que hacerlo con entusiasmo y gratitud. La emoción desde la que haces las cosas, es lo que determina cómo se siente tu día, cómo te perciben los demás y hasta los resultados que obtienes.
Las emociones son energía: y esa energía vibra
Todos emitimos una frecuencia emocional. Así como una estación de radio transmite música, nosotros transmitimos emociones, y eso crea nuestra experiencia del mundo.
Existen emociones de baja frecuencia, como la vergüenza, el miedo, la ira o el orgullo. Cuando actuamos desde ahí, solemos entrar en conflicto, nos cerramos, y atraemos más situaciones que confirman esa energía. Un ejemplo claro: si vas a una entrevista de trabajo con miedo a no ser suficiente, probablemente tu lenguaje corporal, tus respuestas y tu energía no reflejen lo mejor de ti.
En cambio, cuando elegimos actuar desde emociones de alta frecuencia —como la voluntad, la aceptación, el amor o la alegría— la historia cambia. Imagina iniciar una conversación difícil con tu pareja desde el amor y no desde el orgullo. O presentar un proyecto desde la alegría de compartirlo, y no desde la ansiedad por ser aprobado.
Ahí es donde ocurre la magia.
Una emoción puede cambiar tu entorno
Quizás creas que basta con tomar acción, levantarte temprano, cumplir metas y avanzar. Pero si esa acción no va acompañada de una emoción alineada, muchas veces no se siente ni auténtica ni satisfactoria.
Por eso, no se trata solo de hacer, sino de desde dónde haces.
¿Estás trabajando por miedo a no tener dinero, o porque disfrutas lo que haces?
¿Estás ayudando a alguien desde la obligación, o desde la empatía?
¿Estás emprendiendo por orgullo, o por pasión genuina?
La frecuencia de la emoción con la que vives se convierte en un imán. Tu entorno empezará a reflejar esa sintonía. Personas más afines llegarán, las oportunidades se sentirán más naturales, y tu energía tendrá más coherencia.
Ejemplo real: el cambio de actitud que transforma
María, una amiga mía, tenía una tienda online de ropa. Durante meses, no lograba vender casi nada. Estaba frustrada, se sentía insegura y su contenido en redes, aunque estéticamente bonito, transmitía rigidez. Un día decidió parar y preguntarse:
¿Desde qué emoción estoy haciendo esto?
Se dio cuenta de que cada publicación la hacía desde el miedo a fracasar. Así que empezó a reconectar con su propósito original: ayudar a otras mujeres a sentirse cómodas, auténticas y lindas con lo que usaban.
¿El resultado? En las semanas siguientes, las ventas comenzaron a fluir, los comentarios eran más positivos y ella volvió a disfrutar lo que hacía.
Elige tu frecuencia, elige tu realidad
Así como eliges tu ropa cada mañana, puedes elegir desde qué emoción vas a actuar hoy. Haz de esto un hábito. Antes de cada conversación, proyecto o decisión, hazte esta pregunta mágica:
¿Desde dónde estoy haciendo esto?
¿Desde el miedo, o desde la confianza? ¿Desde el juicio, o desde el amor?
Porque al final, desde qué emoción transmitimos nuestras acciones no solo determina cómo nos sentimos nosotros… también moldea el mundo a nuestro alrededor.
El poder está en ti: vibra alto y transforma tu mundo.